En la derruida plaza de toros de Écija (un pueblo de Andalucía, en España) Jesús, un chaval de once años, juega al fútbol. Él y sus amigos pasan la tarde inventándose nuevas formas de gastar el tiempo. Pero esa tarde va a ser diferente: va a matar a un hombre. Abandonado por sus compañeros, Jesús va dejando la infancia atrás para entrar en un mundo adulto que aún no está preparado para comprender.