Tercera y última entrega de la saga "Candyman". Cuenta la historia de Caroline (Donna D'Errico), que trata de ganarse la vida como artista en un barrio hispano de Los Ángeles. La joven es la última descendiente de un hombre negro que fue linchado por enamorarse de una mujer blanca y que, según la leyenda, se convirtió en un muerto viviente en busca de venganza. Ahora Caroline tiene pesadillas sobre este ser terrorífico.