Vittorio De Sica interpreta al presidente de una comisión censora y Alberto Sordi es Agostino, el secretario general que juzga despiadadamente carteles y películas picantes y manda cerrar locales. La hija del presidente (Franca Valeri) ha regresado de Londres, y su padre ve en el puro e infatigable secretario a un buen partido para su hija, pero no todo es como aparenta...